Principio de relación secuencial donde un evento, entidad o condición (causa) genera o determina la aparición de otro fenómeno (efecto). Proceso fundamental que establece conexiones temporales y operativas entre acontecimientos.
Características:
- Establece un vínculo direccional entre antecedente y consecuente
- Opera como principio organizador de la experiencia temporal
- Permite la predicción y explicación de fenómenos
- Mantiene diferentes niveles de determinación (lineal, probabilística, emergente)
- Constituye la base de la acción intencional y dirigida
- Genera cadenas de concatenación que estructuran la realidad
La relación causa-efecto puede analizarse a través de los campos vibracionales:
- 0: Contiene todas las posibles cadenas causales en estado potencial
- 1: Da forma a la intuición básica de conexión entre eventos
- 2: Discrimina entre correlaciones accidentales y conexiones causales
- 3: Establece redes de relaciones causales complejas e interconectadas
- 4: Se manifiesta en secuencias observables y procesos concretos
Este principio conecta con el concepto de gradiente, donde cada efecto es el agotamiento de un descenso, la manifestación final de un proceso que, al completarse, alimenta la siguiente iteración, generando ciclos de causa y efecto que impulsan la evolución del sistema.